Rosalinda se llamaba la hermosa joven nacida en Ospino, era la última de 10 hermanos y la única hembra. Sus padres don Evaristo y Doña Severiana, la recibieron con mucho amor y alegría y sus hermanos la celaban hasta de las sombras. Se había desarrollado sana y hermosa, sus cabellos eran rubios y sus ojos parecían pepas de alelí, la madre la educaba en casa y le compraba los más bonitos vestidos. Los muchachos del pueblo la pretendían sin éxito, mientras ella cual princesa soñaba con un príncipe azul, en cierta ocasión apareció en el pueblo, un coplero de nombre Gabriel Machuca. De inmediato llegó a sus oídos el nombre de Rosalinda, la muchacha más bella y distinguida de aquel lugar, esa misma noche luego de una actuación en el único local de Ospino, fue a llevarle serenata a su misma casa. Don Evaristo salió y llamo su atención, el comprendiendo el reclamo del ofendido padre, se marchó sin poner reparos. Pero la muchacha lo había visto escondida, tras su ventana y de verdad le gustó aquel desconocido, luego se encontraron en la misa y las miradas iban y venían. La madre lo invito almorzar ese día y el por supuesto las acompaño, en casa se presentó ante el padre y los nueve hermanos, estos no lo vieron con buena cara por ser un trovador, cuyo oficio era ir de pueblo en pueblo o de feria en feria. Así transcurrió una semana, y luego un beso fugaz tras un descuido de la madre, que los vigilaba en cada visita y paseos bajo la luz de la luna. Ese lunes Rosalinda no salió de su cuarto, la madre preocupada abrió la puerta y entro, la habitación estaba en orden, sólo una nota sobre la mesa la cual decía: me marché con Gabriel bajo mi responsabilidad y sin ninguna presión o coacción los quiero, Rosalinda. Así explotó esa bomba tanto en la casa materna, como en el pueblo, ese lunes el padre y los hermanos se organizaron para ir tras los enamorados. Fue en vano, nadie los vio partir y por muchos meses, nada se supo de la única hija de aquella familia. Al año una carta dirigida a la madre y cuya remitente era la hija pérdida, decía que se había casado con Gabriel y además acababa de dar a luz una hermosa niña de nombre Amor.
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