Bartolo Vivo Bartolo Muerto #7

Una mañana se levanto Braulio y encontró su caballo despedazado, fue una escena horrible, porque el había tenido una pesadilla con el espíritu del difunto y la bestia. No podía creer lo que estaba frente a sus ojos, los vecinos lo alertaron una vez más para que se fuera de la casa. Braulio como buen llanero era valiente y porfiado, tomo ciertas medidas, como las de mandar a bendecir toda la casa con el padre Celestino y colocar cruz de Palma bendita, sábila, cuerno de ciervo y una cinta de color rojo y colocarla en cada habitación, cocina, sala y hasta en el patio. El espíritu luego de matar el rucio se calmó, Braulio trajo a Rosita una mujercita que estaba resuelta a rejuntarse con el, para atenderlo y luego traer descendencia y comenzar una familia. Pero mientras estaba sola en la casa, BARTOLO le escondía las llaves, cubiertos y le soplaba la nuca mientras hacía los quehaceres. Una noche se baño y se acostó a esperar a su Apureño, al rato sintió como le dieron una nalgada fuertísima, que hasta la mano quedó dibujada en su piel. Al llegar Braulio la encontró con una crisis de nervios, al otro día Rosita se marchó con su ropita para no regresar. Ese día en medio de la sala, el llanero furioso lo reto a que le diera la cara y resolvieran quien se iba y quien se quedaba en aquella casa. Al otro día amaneció maniado como un novillo cuando lo van a errar, entonces decidió que lo mejor era vender esa casa y buscar otros rumbos y así lo haría. Quedando el espíritu de nuevo como amo y señor de la propiedad.

1 comentarios:

Unknown dijo...

Ese espíritu malo 🙁🙁

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