Carmen la niña de sus ojos, era la tercera del matrimonio entre Estilita y BARTOLO, luego de María la mayor y Rosa la del medio quien falleció en el campo. Había nacido rubia y era exageradamente bella y graciosa , su padre la prefería entre todos sus hijos. Carmen aún lo recordaba como el padre cariñoso y protector, por eso nunca escuchaba los malos comentarios que hacían hacía el difunto. Lo esperaba cada tarde en el camino, este la veía a lo lejos y ambos corrían al encuentro, el la alzaba en lo más alto y le decía que era su estrellita más reluciente de todo el universo. Cuando se vinieron a Maracay su papá le compro una cama para ella solita, ella recuerda que tenía una estrella tallada en la madera y esa era ella. Era la única niña que podía entrar a la bodega y siempre salía con golosinas, sus hermanos en cambio eran ignorados por el padre. BARTOLO veía en su hija a la raza blanca y aunque nunca se lo dijo a nadie, nunca estuvo conforme con el color de su piel morena, de ahí que caso con una catira. Carmen era la única que había buscado a la madre, sus otros hijos nacieron morenos claros. Ella sufrió quizás más que sus hermanos, cuando un infarto mato al padre, ahora sin el era tan sólo una hija más y una hermana más, ya no era el centro de atención. Al crecer decidió ser estilista y rodearse de belleza, luego se casó con Héctor su noviecito de infancia y ya tenía 3 descendientes. Nunca ha podido olvidar a BARTOLO el hombre bueno y cariñoso quien fue el mejor padre para ella. Nunca escucho ruidos en la casa, siempre se sintió feliz y segura, sin duda el amor de ambos padres le moldearon su mundo. Mientras la casa estaba en venta, Braulio el incrédulo la puso en venta.
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