El Hotel Humboldt

Ubicado a más de 2.100 Mt de altura en la cima del cerro del Ávila o waraira repano como últimamente fue bautizado. Es el faro que por un lado vigila a la gran Caracas y por el otro lado observa el Mar Caribe, desde el centro de la ciudad se puede observar la enorme estructura de más de 60 Mt de alto, construido en 1955 y abierto al público en 1956 por el entonces presidente de Venezuela Marcos Pérez Jiménez. En dicho hotel el lujo prevalecía y sólo tenían acceso las clases altas de la sociedad caraqueña, al igual que los militares de aquella tiranía. En el lugar donde las élites disfrutaban de las mejores orquestas y cantantes nacionales e internacionales de la época, en donde ocurrió la muerte de una misteriosa dama, unos aseguran que su nombre era Rosita Pelayo y al parecer era la amante del dictador, una noche mientras disfrutaba de las delicias del amor con su amante, dicen se apareció la primera dama con su escolta militar. Al parecer había llegado una nota a sus manos, donde le alertaban de la infidelidad del esposo, subieron al piso 8 y tocaron fuerte a la puerta. Los nervios y el temor al que dirían los venezolanos, descubierto con su amante el presidente, acaeció un hecho que aún hoy día es confuso, la mujer se precipitó al vacío muriendo al instante. Luego al entrar la esposa ofendida a la habitación, encontró al marido sólo ya dormido. Luego correría entre pasillos, la historia de la pobre Rosita Pelayo, se lanzó en verdad o fue lanzada para ocultar la infidelidad del presidente. Quien la lanzó al vacío? porque sus familiares nunca pidieron una investigación real de lo ocurrido aquella noche en el prestigioso hotel. La Dictadura jamás lo permitió y se borraron todas las pruebas de aquella terrible muerte, hay quienes aseguran haber visto el fantasma de la bella caraqueña, recorriendo el hotel y los alrededores en busca de que se sepa lo que sucedió realmente. Los turistas y vecinos de Galipán, la han visto con ropas y peinado de aquella época, incluso en la habitación del piso, desde donde se precipitó aún dicen percibir su perfume.