El Viejo Cementerio...

...Contaba Alexander que esa media noche como de costumbre salió a ruletear un su viejo caprice , haber si hacía buena plata ya que era viernes y llegarían los buses provenientes de Caracas full de pasajeros.Mientras daba vueltas se encontró con 2 borrachos , que tambaleandose le sacaron la mano y el se detuvo , se montaron y de inmediato lo encañonaron , pidiéndole el dinerito que cargaba para dar vuelto.justo cuando pasaban por el viejo cementerio le dijeron se detuviera , el lo hizo y lo bajaron a cachaso limpio ahí le pidieron que abriera la maleta y lo introdujeron .Luego trataron de encender el vehículo y como no pudieron , huyeron dejándolo encerrado .Cuenta que grito y golpeó el maletero pero no pudo abrirlo , decidió callar y esperar haber que sucedía, al rato comenzó a escuchar muchas voces y de inmediato se abrió la maleta , salió y vio las llaves que tomo y se dirigió a la entrada del campo santo , vio mucha gente caminando sobre las tumbas y fue adentrándose algo desconfiado , pero agradecido pues lo habían rescatado.Ya adentro se encontró con su tia Mariana , está lo abrazo alegre de verlo , luego vio a su padre don Celestino con su viejo traje negro , sorprendido le beso la mano y este lo regaño por andar a esas horas buscando peligro en la calle.El cuenta que no podía creer que lo que le estaba sucediendo era real , quizás había muerto asfixiado en la maleta y era difunto.Asi pasaron frente a el , familiares , amigos y otros conocidos que ya habían fallecido , a ninguno noto alegre o triste , más bien si sorprendidos por su visita .Conversó con todos casi hasta salir el sol , según el todos les preguntaron por sus familiares y algunos hasta recados les enviaron , se comprometió a darlos y por supuesto debía cumplir.Miedo sólo al principio , luego sintió curiosidad y compasión , su viejo le dijo que aún no era su tiempo y le jaló las orejas, por no haber venido nunca ni siquiera a prenderle una velita.Lloro al despedirse y cuenta que por un instante sintió ganas de quedarse en aquel lugar tan lleno de conocidos , donde todos conversaban bajito y nadie sufría ni parecía extrañar sus vidas de penas , rabias, desamores e inconformidad.

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