El Ávila fue testigo mudo de la terrible muerte de la modelo Marisol Da silva Vieira de manos de Víctor Colmenares Lupion. La mañana del 9 de febrero la bella modelo subió el Ávila sin compañía y se encontró con su verdugo Víctor Colmenares Lupion, quien con artimañas y buen léxico se ganó la confianza de Marisol. Luego en la falda del cerro la invito a seguir los senderos de tierra, donde la amenazó de muerte con una navaja si no accedía a sus deseos sexuales, está aterrada trato de luchar y defenderse pero el hombre logró dominar y golpear salvajemente, para luego violarla y asfixiarla con su propia franela. Aún herida trato de escapar y este le dio alcance propinándole 5 cuchilladas 2 en la espalda y 3 en el pecho que causaron su muerte, según determinó la autopsia. Ella comprometida con un joven de la sociedad caraqueñas, el violador vivía con su padre y hermanos en terrazas del club hípico donde los vecinos declararán temerle, por su desviada conducta y constantes acosos sexuales a mujeres y niños. El día 12 de febrero la madre de la modelo señora María Vieira ya angustiada y desesperada y luego de buscarla junto a familiares y amigos por supuesto su novio también, se dirige a PTJ y denuncia la desaparición. De inmediato los Bomberos y la guardia Nacional priman el Ávila en su búsqueda y el día 13 de febrero de 1993 un guarda parques guiado por la fetidez localiza el cuerpo y avisa a las autoridades. PTJ inicia pesquisas y luego de varios días, estas los conducen a la casa del asesino, allí lo capturan y encuentran rastros de sangre de Marisol en sus Zapatos y navaja. Luego de varios interrogatorios confiesa con lujo de detalles el violento crimen. Fue condenado a la pena máxima de 30 años de los cuales sólo cumplió inexplicablemente 18. Luego en la calle cometió otras fechorías sexuales y agresiones a mujeres, siendo nuevamente detenido y las autoridades aseguran aún continúa en prisión.
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