En el año de 1979 llegue proveniente de Maracay a la ciudad de Caracas , recuerdo llegue a una pensión entre las esquinas del muerto a ISLEÑOS en la parroquia Santa Rosalia. Venía con una maletica llena de sueños , dispuesto a seguir con mis estudios y encontrar trabajo para enviarle dinero a mi madre y hermano .No conocía la capital y sin embargo el miedo no me paralizó y de inmediato desde que pise el nuevo circo, que era el antiguo terminal de los autobuses que venían provenientes del interior del país. Comencé a caminar hasta llegar a una vieja pensión donde arrende un cuartucho , esa noche casi no pude dormir entre la nostalgia y la incertidumbre me agobiaban robándome el sueño. Parecía que veía un rostro horrible saliendo de un oscuro rincón, eso me estuvo sucediendo cada noche por un mes y recuerdo que mientras trataba de dormir me zarandeaban la cama y tenía pesadillas escalofriantes. En la habitación todo se ponía en penumbras al apagar la luz y un frío intenso predecía el momento donde salía está figura , como blanquecina y de rostro deforme. Su pedido cada vez era el mismo : Ayúdame...Ayúdame y yo despertaba sobresaltado. Justo cuando cumplí 30 días en aquella pensión, decidí mudarme con una hermana que vivía en otra parte de la ciudad .Al despedirme de la misteriosa mujer que administraba esa destartalada pensión y contarle el porque me marchaba , está me contó que hacía poco tiempo un hombre había sido asesinado mientras dormía. Mientras recogía mi ropa para irme del lúgubre lugar ella quito las sábanas y me mostró una gran mancha de sangre y unos agujeros de bala sobre el asqueroso colchón. Le recrimine por no haberme contado nada al respecto , ella simplemente respondió que no había que temerle al muerto , si no al vivo. Luego Ore mucho por el descanso eterno de esa alma y lamentes el no haberle ayudado. Pero por supuesto me marche de aquella pensión.
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